Toda nuestra vida está marcada por un ritmo, por tiempo, segundos, horas y minutos. A veces sentimos que el reloj nos hunde en su profundo tic tac, y no nos deja escapar, nos vuelve loco, nos desespera y acelera… Las agujas se clavan en nuestro pensamiento y no las dejamos de mirar, sabiendo que nunca retrocederán… Es una simple maquinita que nos ata, que define y ordena nuestros momentos, nuestros días… Pero tenemos que aprender a no ser esclavos del tiempo porque dedicarnos a cosas que nos gustan no es perderlo, dormir un ratito mas, sentarse bajo el sol y mirar el cielo, o tal vez un instante para pensar y reflexionar, un ratito de lectura o dedicarnos a nosotros mismos, nunca es perdida de tiempo, perderlo es no disfrutarlo, es no saber que hacer con él…
¡Precioso blog y preciosos escritos! ¡Tengo una amiga que tiene un blog que me recuerda al tuyo! Aquí está el link: http://unavelaencendida.blogspot.com.es/
ResponderEliminar¡Me encanta el blog! ¡Si escribes algo más, te lo agradeceré!
ResponderEliminar